miércoles, 20 de julio de 2022

Reseña del libro "La Reina del Pacífico: es la hora de contar", de Julio Scherer García.

"Nací rica, rica vine al mundo y no puedo regresar al vientre de mi madre y nacer distinta": Sandra Ávila Beltrán.

Scherer García Julio, "La reina del pacífico: es la hora de contar", Debols!llo, 2008, México, 174 páginas.

Tras la captura de Sandra Ávila Beltrán, "La Reina del Pacífico", el pasado 28 de septiembre del 2007, el periodista Julio Scherer García (1926-2015) inició una serie de actividades para entrevistar con una de las mujeres más importantes en el mundo del narcotráfico en México.

Sin embargo, siento que más allá del interés periodístico y la narrativa en primera persona, a detalle en la prosa tan propias de una crónica y en el estilo de Julio Scherer, el libro es una serie de entrevistas para conocer a fondo la vida de una mujer que ha disfrutado y sufrido en la vida, pero que está siempre vivo el recuerdo de los grandes momentos que guarda para sí y aquellos que declaró al autor.

También el libro es un recuento por los datos del narcotráfico en nuestro país y las demás figuras que sobresalen, de quienes están en prisión, quienes están libres o quienes murieron pero dejaron una huella en la memoria del colectivo mexicano.

Sandra Ávila Beltrán cuenta su vida, desde que vio la luz de este mundo y todo aquello que la rodeó y sigue presente en la actualidad; lo reúne todo: el amor a su familia, sus amigos, sus seres queridos.

También destaca, considero, una filosofía en las palabras de Ávila Beltrán durante las entrevistas a Julio Scherer: "En los medios y en los libros se habla de la delincuencia organizada, de los cárteles. Pero nadie habla de las narcoinstituciones, que son gobierno. Sería el caso del cártel de la PFP, el cártel de la SIEDO, de los narcopolicías que traen charola".

Y es que pienso que también las declaraciones de la Reina del Pacífico es una denuncia por irregularidades y calumnias en su contra, situaciones que de acuerdo a Ávila, son infundios de enemigos y de su rival más grande, el gobierno mexicano, que en ese entonces encabezaba Felipe de Jesús Calderón Hinojosa.

Además, en el libro manifiesta Sandra Ávila: "Yo fui elegida para mostrarme como gran capo de América Latina, cargo lanzado sin pruebas. El peso del gobierno en mi contra. Yo soy una prueba viva de que al narcotráfico se le combate con éxito, éxito con mil comillas".

Y en otra página enfatiza: "He sido una mujer independiente, sin compromisos. Llamarme gran capo, enlace entre cárteles, es ignorarme completa. Y en cuanto al día de hoy, en la cárcel, me sé mujer sola. No podría ser de otra manera. Me mantuve sin ataduras con la delincuencia y así seguiré siendo. En esto va mi nombre, el de mi madre, el de mi hijo, el de las personas que amo".

Finalmente, recomiendo mucho leer este libro porque se trata de una obra de uno de los mejores periodistas que tuvo México y de una mujer que es pieza clave para entender la mafia en México, sus orígenes, el desarrollo, su porqué.

Frases destacadas de este libro:
"La satisfacción completa la da el propio trabajo".

"Hay mañanas en las que digo: hoy no me levanto. Y me levanto".

"El narcotráfico y la corrupción forman parte de un mismo problema. Se alimentan".


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